El que un vehículo responda apropiadamente en todo momento, depende en gran parte de las condiciones de uso y del seguimiento del programa de mantenimiento que se establece para él.
El manual de propietario contiene dos tipos de mantenimiento, uno de servicio normal y otro de servicio severo, dependiendo de la forma en que se opere el vehículo.
Es vital distinguir entre condiciones de manejo normales y severas para darle a su automóvil o flota, el mantenimiento preventivo correcto.
Asumimos que a nuestro(s) vehículo(s) le damos un manejo normal, pero, producto de los tranques o embotellamientos y las largas distancias que debemos recorrer a diario, la conducción se torna de uso severo en cuanto al desgaste del vehículo.
Los intervalos de mantenimiento para las condiciones de manejo severas, de los fluidos y filtros de los vehículos, son más frecuentes así como las inspecciones de algunos componentes.